Más allá del frikismo....

Manga, muñecas japonesas, disfraces, .... estas aficiones poco comunes son las que convierten a Mimi en friki. Y es que ser friki empieza por eso, por tener gustos diferentes a los de las demás personas. Anteponer tus gustos a los de la sociedad, aunque con ello te conviertas en el elemento extraño de la misma.

Pues si, Mimi es así. Y eso la hace grande porque vive la vida tal y como a ella le gusta, sin importarle lo que piensen de ella y disfrutando con sus aficiones al máximo. En este punto, más de uno se acordará de cosas que ha dejado de hacer por el que pensaran o por si lo señalaran con el dedo. Ella no es así. Si lo fuese quizá coleccionaria sellos en lugar de muñecas, igual se disfrazaría con camisetas de equipos de fútbol en lugar de usar esos disfraces que ella misma confecciona, y quizás no disfrutaria de la vida como lo hace haciendo lo que le gusta.

También es verdad que el tener gustos diferentes tiene consecuencias negativas. Muchas veces te sientes rechazado por esa sociedad que no entiende tus gustos. Pero lo peor no es eso, lo peor es que incluso a veces ni tan siquiera los respeta. Con el tiempo aprendes a vivir con ello y, aunque siempre tienes esa espina clavada, vivir haciendo lo que te gusta compensa con creces.